El próximo lunes 25 de noviembre, a las 13hs, el Tribunal Oral N° 3 de Quilmes (Yrigoyen 475), dará a conocer la pena que pesará sobre la condena contra Daniel Prieto, policía bonaerense fusilador de Kevin Amarilla.
Kevin, de 15 años, vivía en el barrio Villa Los Álamos (Quilmes). La noche del 29 de octubre de 2016 recibió cuatro disparos del arma reglamentaria del policía, por la espalda.
Atravesamos un juicio con llamativa celeridad, en dos audiencias (15 y 20 de noviembre) donde el objetivo de la fiscalía y la defensa fue instalar la “versión de verdad” de Prieto y justificar así su accionar, desviando todas las responsabilidades contra quien fuera la víctma real del hecho.
La clásica puesta en escena judicial, con la que siempre nos encontramos al proponernos batallar contra el aparato represivo estatal, no puede evidenciarse sin tener en cuenta los antecedentes nefastos que pesan sobre ese tribunal a la hora de definir responsabilidades políticas alrededor de los crímenes cometidos contra lxs pibes de nuestras barriadas.
Pero no fue la certeza de los jueces ante las evidencias planteadas a lo largo del proceso judicial la que impuso la condena; fue la lucha organizada la que puso en jaque las estrategias del sistema que garantizan la impunidad.
Pero nuestra memoria activa y nuestra lucha se sostienen más alla del aparente sentido de justicia que ostentan quienes disponen de los destinos de nuestras vidas.
Dentro del tribunal y en las calles estaremos exigiendo la condena al represor y justicia por Kevin y todxs lxs pibxs fusiladxs por el aparato represivo en democracia.
¡Por Kevin y todxs lxs pibxs!
¡Basta de gatillo fácil!
