El ministro de Seguridad de Chubut, Federico Massoni, acumula un nefasto historial represivo y una defensa encarnizada de estas prácticas desde que ocupa su cargo. Este fin de semana se conoció un nuevo hecho que lo tiene como protagonista. Por si fuera poco, busca llevar su discurso al Senado desde el oficialismo local.
El domingo, a partir de una nota de la periodista Martina Garbarz, tomó mayor notoriedad pública un hecho represivo que involucra directamente al ministro de Seguridad chubutense Federico Massoni. Una vez más. Esta situación repudiable ocurrió el pasado 11 de junio, cuando Alex Fredes (14) salió a comprar al almacén, en el barrio Inta de la ciudad de Trelew. En el camino, se le cruzaron tres camionetas de la policía provincial, y de una de ellas bajó Massoni. El ministro lo puso contra la pared y le preguntó su apellido. Cuando Alex se lo dio, Massoni comenzó a destilar todo su racismo mediante insultos y le metió una trompada en la cara.
No es la primera vez que la familia Fredes sufre hechos represivos. Tampoco lxs vecinxs del barrio Inta, donde la discriminación, provocación y violencia por parte de las fuerzas provinciales son una constante. El año pasado, Gabriel (padre de Alex) fue baleado en la cara desde una camioneta de la policía local, mientras cerraba el portón de su casa. Luego de radicar la denuncia, a los pocos días, tres policías entraron a su casa por la noche, maniataron a él y a su esposa, y golperaron a sus hijos.
“A vos te gusta hacer denuncias, negro olor a patas sucias, tira piedras”, fue lo que le dijo Massoni a Alex, recordándole la denuncia de su papá, antes de darle la orden a los policías que lo acompañaban de apagar la cámara que tienen que portar obligatoriamente para registrar su accionar. Lo que siguió fue una paliza en plena calle, y la detención del pibe, al que trasladaron al Centro de Detención de Menores. Cuando su papá Gabriel lo fue a buscar, al enterarse por testigos de que su hijo había sido detenido y preocupado porque no volvía, lo encontró en el Centro, completamente golpeado y atado con un precinto.
Un hecho que tiene total coherencia con la línea represiva del ministro, que hace una semana salió a defender el video donde se ve a la Infantería chubutense entrenando, al son de una “arenga” contra el movimiento piquetero que decía: “Piquetero, piquetero, ten cuidado, ten cuidado, en una noche muy oscura a tu villa entraré”. Para Massoni, este canto que rebalsa de odio de clase es parte del “folklore del entrenamiento”, y, por las dudas, dejó clara su postura al sostener que “El piquetero es un delincuente. Cuando corta la ruta está cometiendo un delito y priva a la gente de su libertad. Y la policía debe velar por la libertad y la seguridad de los ciudadanos“.
Ya en 2018, el mismo Massoni atropelló a Juan Altamiranta, cuando un grupo de trabajadorxs se movilizaron en su contra a las puertas de un canal donde estaba dando una nota. El 8 de abril de 2020, apenas iniciada la pandemia por COVID-19, se hizo público el audio enviado por el Secretario de Seguridad de la Policía de la provincia de Chubut, Paulino Gómez, al jefe de la comisaría 1ª de Trelew, comisario Zabala, donde le exigía detener gente ya que no podía ser, según el propio Massoni, que esa comisaría no tuviese detenidos. De más está aclarar que Massoni no sólo no se manifestó al respecto, sino que además sostuvo en su cargo a Gómez.
Desde CORREPI denunciamos también, en noviembre pasado, la luz verde que dió el funcionario a la Resolución 145/2020 que legaliza el gatillo fácil en la provincia, tal como hiciera la ex ministra Patricia Bullrich respecto de las fuerza federales en 2018, con la recordada Resolución 956/2018 que consagró normativamente la “doctrina Chocobar” del disparo a personas desarmadas y por la espalda. Uno de los hechos de gatillo fácil más conocidos, luego de la implementación de esta resolución, fue el asesinato de Alejandro “Tino” John, un hombre de 62 años que padecía trastornos psiquiátricos y recibió un disparo en la cabeza por parte de efectivos del grupo GEOP. Este accionar represivo también fue defendido públicamente por Massoni, quien lo calificó de “correcto”. Cualquier parecido con el accionar de la policía bonaerense del ministro Sergio Berni contra el músico Santiago “Chano” Moreno Carpentier no es pura coincidencia.
Todo esto, en un contexto de enorme movilización popular en toda la provincia, con dos ejes principales: el reclamo de estatales por salarios totalmente absorbidos por la crisis económica que estamos atravesando, y además, pagado en cuotas; y por otro lado, la enorme lucha medioambiental que se está llevando adelante hace años contra la megaminería y en defensa del agua. A estos reclamos, la respuesta del gobernador Arcioni y el ministro Massoni es la represión, como ocurrió en noviembre pasado contra la masiva movilización que se llevó adelante en la Legislatura provincial, contra un grupo de asambleístas que fueron cruzadxs en la Ruta 7, golpeadxs y detenidxs; o como pudimos ver también en la cacería que se llevó adelante contra trabajadorxs, posterior a la protesta que se realizó en una de las últimas visitas del presidente Alberto Fernández a Chubut.
Ahora Federico Massoni va por un nuevo paso en su carrera política y apuesta a convertirse en senador nacional por el partido “Chubut Somos Todos”, liderado hoy por el gobernador Mariano Arcioni y fundado por el ex gobernador, el fallecido Mario Das Neves, como parte del Frente Renovador, y hoy en alianza con el Frente de Todos. Con este prontuario, no es difícil suponer que la presencia de Massoni en el senado significaría entonces un voto a favor indiscutido a cualquier propuesta legislativa que se quiera impulsar en materia represiva contra el pueblo.
