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Hoy se cumple un nuevo aniversario del fusilamiento por la espalda de Rafael Nahuel por parte del Grupo Albatros de la Prefectura Naval Argentina, en Villa Mascardi, Río Negro. Hasta el día de la fecha, la causa sigue con total impunidad, debido a los constantes entorpecimientos y encubrimientos en la investigación por parte del Estado.

El joven de 21 años participaba de la recuperación de tierras en la Lof Lafken Winkul Mapu de Lago Mascardi (Bariloche). Bajo el comando de prefectura, junto a gendarmería y la policía provincial, se desplegó un operativo que descargó una brutal represión, con mujeres y niñxs detenidxs, para desalojar el predio ancestralmente reclamado por la comunidad mapuche.

Unos días después, personal del Grupo Albatros se adentró en el monte, persiguiendo a quienes habían buscado refugio allí. Con un total de 114 disparos efectuados por los prefectos, contra el pequeño grupo desarmado, Rafael cayó herido cuando intentaba escapar al ataque, dando la espalda a sus perseguidores. Sus compañeros Facundo Jones Huala y Luciano González, aun a riesgo de lo que finalmente ocurrió –su inmediata detención- cargaron a su amigo herido hasta la base del monte, en un denodado pero inútil esfuerzo por salvarle la vida.

Recordemos que, en la segunda mitad del año 2017, después de la desaparición forzada seguida de muerte de Santiago Maldonado, el gobierno de Cambiemos, con Patricia Bullrich de principal vocera, secundada por Mauricio Macri y Elisa Carrió, buscó estigmatizar al pueblo Mapuche, instituyéndolo como principal “enemigo interno” que sirviera para justificar todo su accionar represivo hacia la comunidad.

Después de un fallo, en mayo de 2019, de la Cámara Federal de Apelaciones de Fiske Menuco (Gral. Roca según la denominación “oficial”) que puso una buena parte de las cosas en su lugar, ya que procesó con prisión preventiva al cabo 1º Francisco Javier Pintos, de cuyo subfusil MP5 salió el proyectil que mató a Rafael Nahuel, y puso en blanco sobre negro cómo operó el Poder Ejecutivo Nacional y, en particular, el Ministerio de Seguridad, para implantar una versión falsa en el expediente, la Sala Tercera de la Cámara Federal de Casación Penal, con las firmas de Liliana Elena Catucci, Eduardo Rafael Riggi y Juan Carlos Gemignani, revocó ese pronunciamiento, y, en consecuencia, con una integración suplente, la misma Cámara Federal de Apelaciones dictó la falta de mérito para procesar o sobreseer al prefecto asesino.

Así, la causa volvió a la primera instancia, donde está pendiente la realización de una tercera pericia balística para conformar –como lo hizo la primera- que la bala que mató a Rafael fue disparada por el fusil que llevaba el prefecto. Quien se opone a su realización es el defensor de Pintos, Marcelo Hugo Rocchetti, ex funcionario de la Secretaría de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires durante la gestión Cambiemos de María Eugenia Vidal.

Al cumplirse el tercer aniversario del asesinato de Rafael Nahuel seguimos exigiendo:

¡JUSTICIA POR RAFAEL NAHUEL Y SANTIAGO MALDONADO!

¡BASTA DE CRIMINALIZAR A LOS PUEBLOS ORIGINARIOS!

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