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El acto realizado el 4 de septiembre por Víctoria Villarruel, candidata a vicepresidenta del partido “La Libertad Avanza”, espacio liderado por Javier Milei, llevó a un edificio público, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, su campaña por la reivindicación del terrorismo de estado y el genocidio de la dictadura cívico-militar-eclesiástica.
Villarruel obtuvo su título de abogada el mismo año que se inició la gestión de Néstor Kirchner, gobierno que, bajo el impulso de décadas de lucha popular, habilitó la reapertura de los juicios contra los genocidas tras la anulación de las leyes de impunidad. En ese momento, Villarruel formaba parte de una organización pro- militar llamada Asociación Unidad Argentina (Aunar). En 2006, conformó el Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (Celtyv), dedicándose a visitar genocidas presos y propagandizar sus defensas.
A 40 años de democracia, el partido “La Libertad Avanza”, con apenas matices de diferencia de sus primos de Juntos por el Cambio, enarbola un discurso que reivindica y legitima la represión y la violencia estatal como herramientas de control social. No sólo niegan la represión genocida, las y los 30.000, los Centros Clandestinos de Detención, la apropiación de niños y niñas, el secuestro y tortura, los vuelos de la muerte y el latrocinio. Lo levantan como bandera, en un claro anuncio de cómo responderán, si llegan al gobierno, cualquier demanda popular en defensa de derechos democráticos de cualquier índole.
Ya debimos enfrentar este discurso durante la presidencia de Mauricio Macri, como en mayo de 2017, cuando miles de personas salimos a las calles para frenar el beneficio del 2×1 que la Corte Suprema quiso otorgar a los genocidas.
Porque conocemos la VERDAD, no nos traiciona la MEMORIA y siempre vamos a estar en la calle gritando por JUSTICIA, ayer estuvimos en las calles para repudiar ese acto criminal, y seguiremos estando para defender los derechos que ya conquistamos y luchar por los que nos faltan. NO OLVIDAMOS, NO PERDONAMOS Y NO NOS RECONCILIAMOS.
Ilustración: @iarailustradora

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